La historia detrás de la crisis del oxígeno
Desde junio del año pasado, los hospitales de las regiones del país pidieron oxígeno para los pacientes con COVID-19. En respuesta, el Minsa y Essalud firmaron dos convenios con la UNI para adquirir 59 plantas de oxígeno que aún no tiene fecha de entrega. Mientras tanto mueren al día más de 200 personas
“La gente ahorita se está muriendo por falta de oxígeno. Tenemos médicos y enfermeras hospitalizados, que se han contagiado atendiendo pacientes. Todos estamos pidiendo auxilio, ya no sabemos a dónde acudir”.
Así clama por ayuda la doctora Yanet Yachi, decana del Colegio Médico de Huancavelica, región que está muy cerca de alcanzar los 2.000 casos de COVID-19 en lo que va de este año y que desde enero registra 62 fallecidos.
Huancavelica fue una de las primeras regiones en ingresar al nivel de alerta extremo, que pasó a cuarentena total por el gran incremento de contagios. De forma similar, Huánuco, Junín, Ica, Áncash y Pasco, que también se encuentran en ese nivel, están desbordadas por la cantidad de pacientes que requieren oxígeno para salvar sus vidas.
Ayer el presidente Francisco Sagasti reconoció, en declaraciones a RPP, que el país no estaba preparado para la alta demanda de oxígeno de la segunda ola. “Estuvimos programados para atender una duplicación en pocas semanas. Sin embargo, como ha pasado en todo el mundo […], se ha triplicado la demanda. Para ese adicional no estábamos preparados porque todos los países considerábamos que [la duplicación] iba a ser suficiente”, indicó.
El jefe del Estado indicó que el Gobierno de Chile ofreció 40 toneladas de oxígeno por semana, aunque solo pueden llevarlo hasta Antofagasta. Explicó que es necesario tener tanques especiales para recibir el cargamento del insumo desde esa zona y luego trasladarlos a los hospitales del sur del país.
¿Cuál es la situación actual que enfrenta el Perú para contar con oxígeno y combatir el COVID-19? ¿Tienen las regiones oxígeno suficiente para salvar la vida de las personas infectadas con coronavirus?
En el país, además de las plantas generadoras de oxígeno, se usan isotanques o tanques criogénicos, que reciben oxígeno líquido de las empresas generadoras de ese producto, como Linde Perú y Air Products, principalmente. En la actualidad, se producen alrededor de 400 toneladas de oxígeno al día, pero el consumo en esta segunda ola llega a las 550 toneladas. Hay un déficit de 110 toneladas diarias, informó esta semana la ahora exministra de Salud Pilar Mazzetti.
A nivel nacional la situación es muy crítica. El viernes 6 de febrero, en la provincia de Huaraz, capital de Áncash, se vivió uno de los escenarios más dramáticos cuando en el hospital de Essalud fallecieron seis personas porque el oxígeno se agotó durante la madrugada.
Hospital de Huánuco de Essalud.
“Ha existido un caso terrible este viernes, en el sentido de que en el hospital de Essalud de Huaraz se acabó el oxígeno y hubieron fallecidos. Tanto así que los ciudadanos de Caraz que hicieron una colecta pública y lograron comprar tanques criogénicos tuvieron que prestar alrededor de 8 cilindros, al igual que Yungay”, contó el médico infectólogo Augusto Tarazona, presidente del Comité de Salud Pública del Colegio Médico del Perú.
El hecho motivó a que Essalud activara su plan de emergencia para continuar suministrando oxígeno a las personas que estaban graves. “A fin de resguardar la vida de nuestros pacientes se dispuso el traslado de 34 de ellos al hospital de campaña Rosas Pampa [...] y otros 10 al hospital II de Chimbote”, indicaron a través de un comunicado de prensa.
El doctor Tarazona narra que, desde setiembre del año pasado, se llegó a un acuerdo con el Minsa para la instalación de una planta de oxígeno en Caraz; sin embargo, hasta la fecha no cuentan con ella. “Nos dijeron que para noviembre iba a salir, luego que antes de fin de año, ahora nos dicen en febrero y luego que a más tardar en marzo”, indicó.
En Huancavelica se vivía una situación similar con el desabastecimiento de oxígeno en el hospital de Essalud de la región, debido a que la única planta generadora con la que cuentan ya no puede seguir suministrando a varios hospitales al mismo tiempo.
“Desde la noche del 2 de febrero todo se ha tornado crítico, todo el mundo desesperado por conseguir oxígeno porque la planta del Minsa ya no podía dar a Essalud y no porque no queramos, sino porque el hospital regional no puede con sus propios pacientes ya. En toda la región tenemos casi 100 hospitalizados”, afirmó la doctora Yachi.
La especialista señaló que esa única planta se instaló tras los constantes pedidos que se vienen haciendo desde la primera ola. “Nosotros desde el año pasado hemos estado solicitando. Desde el 11 de mayo le solicité al gobernador, por eso se ha construido la planta de oxígeno los primeros días de noviembre”, contó. Pero eso ya no es suficiente.
En la región Huánuco, fallecieron hasta 24 pacientes en un solo día, según la Diresa. (Foto: AFP)
En Huánuco, pese a los reiterados pedidos de los médicos, el problema del oxígeno todavía no ha encontrado solución. La doctora Darly del Carpio, decana del Colegio Médico, reveló que han pedido ser abastecidos desde junio del año pasado. Según dijo, las dos plantas de la región “no cubren ni el 25% de lo que se necesita en este momento”. Acotó que esta semana “llegaron 30 balones de oxígeno llenos y 18 vacíos” desde Lima.
En tanto, el doctor Manuel Rueda señaló que en la provincia de Pasco no tienen ninguna planta de oxígeno, ni de Essalud ni de Minsa, pese a que se han realizado solicitudes desde el año pasado. Indicó que el hospital regional solo cuenta con un tanque que es llenado cada cierto tiempo. “Dependemos de que alguien traiga oxígeno”, lamentó.
“Se ha tenido varias reuniones acá con el gobernador. Han dicho que ya va a llegar un día y así nos tienen todo el mes. Se ha esperado que llegue la segunda ola para que recién comiencen a hacer las gestiones para poner una planta de oxígeno aquí en el hospital más grande, que es el Daniel Alcides Carrión, referencial de toda la región”, sostuvo.
En Lima, la situación no es distinta. Jesús Valverde, médico intensivista del hospital Dos de Mayo y presidente de la Sociedad de Medicina Intensiva, relató que cualquier paciente que llegue al nosocomio debe llevar su balón de oxígeno porque ya no se dan abasto.
“El hospital se está alimentando del isotanque y lo están llenando al 75% por parte de la empresa Linde. No hay un documento oficial, pero verbalmente nos han dicho que estamos utilizando mucho oxígeno porque la dotación está muy restringida. Nunca se va sacar un documento porque va crear pánico, pero internamente nos pide que usemos menos oxígeno a través de las cánulas de alto flujo porque consume bastante”, declaró a este Diario.
Precisamente el oxígeno de alto flujo contribuye a la recuperación de los pacientes con COVID-19. Según explicó Valverde, “evita que el 30% pase a UCI”. "En emergencia se está cerrando la puerta del hospital por horas y eso no solo pasa en Dos de Mayo, también en los hospitales Cayetano Heredia y Arzobispo Loayza. Necesitamos plantas de alto volumen no plantas chiquitas”, aseveró. Y acotó que es “urgente” una planta que trabaje en simultáneo con los isotanques.
En el hospital Guillermo Almenara de Essalud, entre veinte y treinta personas esperan varias horas en Emergencia para acceder a un punto de oxígeno. “Hay sesenta personas que están a la espera de que se desocupe una cama UCI”, detalló uno de los médicos que trabajan en Emergencia de ese nosocomio.
Para enfrentar esta crisis, el 30 de octubre del año pasado, la exministra Pilar Mazzetti suscribió un convenio con el rector de la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), Jorge Alva, para la adquisición de 47 plantas de oxígeno. El 6 de noviembre, el Minsa desembolsó un primer pago de S/42’503.189,27 de un total de US$26’586.269 (S/96'893.657,37). Con ello, se comprometían a entregar 18 plantas de oxígeno, treinta días después; sin embargo, solo se han entregado tres: una en la región Arequipa, otra en la ciudad de Pisco y una tercera en Satipo, en Junín.
El área de comunicaciones de la UNI informó a este Diario que tienen “dificultades en el mercado internacional para la adquisición de los equipos para montar plantas de oxígeno medicinal. […] Las empresas en el extranjero, principalmente en Europa, que proveen los componentes para plantas de oxígeno medicinal se encuentran saturadas en cuanto a su fabricación, por la alta demanda internacional, que es un inconveniente para la importación de los componentes”.
Esta institución se ha comprometido a entregar entre febrero y marzo las plantas restantes.
Carolina Cabanillas, gerenta central de Abastecimiento y Bienes Estratégicos de Essalud, señaló a El Comercio que el 5 de febrero también firmaron un convenio con la UNI para adquirir 12 plantas de oxígeno. Esto a pesar de que esta institución no había cumplido los plazos de entrega establecidos. Mientras esto ocurría, la Universidad Católica, en convenio con la empresa Seralt S.A., tenía ocho plantas disponibles para instalar.
El ingeniero Fernando Jiménez, jefe del Servicio de Análisis Energético y Ambiental de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), contó que Essalud les ha pedido hasta en cinco ocasiones cotizaciones, pero nunca han adquirido ninguna.
Además, detalló que, en el caso de la UNI, necesitan importar elementos para la fabricación de las plantas. “Ellos no fabrican, ellos importan. Ellos están importando las plantas y armándolas acá. Armarlas es juntar los componentes, pero ellos no han diseñado ni fabricado acá”, precisó. Agregó que incluso el presupuesto de lo ofrecido por esa institución resulta “más del doble de lo que hacemos acá”.
Jiménez contó que, por su lado, hasta ahora ellos han entregado 27 plantas de oxígeno a 14 regiones del país, que fueron adquiridos “de parte de municipios locales, algunos grupos que se organizaron con colectas, empresas privadas y algunos que donaron”.
La UNI, a través de su comunicado de prensa, reconoció que han tenido demoras “para la adquisición de los equipos necesarios para montar plantas de oxígeno medicinal”.
Mientras tanto, hace unos días, Pablo de la Flor, director ejecutivo de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), informó a El Comercio que las empresas mineras Chinalco, Minsur, Southern Copper y Gold Fields donaron plantas de oxígeno al sector Salud, que hasta ahora se encuentran inoperativas por “temas burocráticos”.
Son diez plantas para los hospitales de Lima, Puno y Cajamarca que todavía no han entrado en funcionamiento por falta de permisos o porque todavía no fueron recibidas por las autoridades competentes.
A través de un comunicado, Linde Perú informó que presta su apoyo para que Southern Perú esté en capacidad de producir 16 toneladas por día de oxígeno medicinal.
A poco más de 11 meses de reportarse el primer caso de COVID-19 en el Perú y con más de 43,000 personas fallecidas a nivel nacional, estas son todas las plantas de oxígeno con las que se cuenta en todo el país.