El cartón como resistencia

Natalia Iguiñiz. La artista presenta una obra que alude a la precariedad de estos tiempos, algo que sucede no solo debido a la pandemia, sino también por la violencia de género, la discriminación, la falta de oportunidades y la crisis política.

La obra de Natalia Iguiñiz ha sido un permanente desafío a una sociedad marcada por la discriminación, la violencia machista y la exclusión social. Hace tres años, se presentó una retrospectiva de su trabajo, bajo el título de “Energías sociales / Fuerzas vitales. Natalia Iguiñiz: arte, activismo, feminismo (1994- 2018)”, ahí se pusieron en contexto algunos de sus proyectos más significativos como “Perrahabl@” (1999), “La otra” (2001), o “Pequeñas historias de maternidad” (2005- 2015), en los que utilizó distintos medios como la fotografía, el grabado, la instalación y la intervención en espacios públicos para comunicar inquietantes mensajes. “Esa muestra fue como un parteaguas – dice la artista–, veo 25 años de trabajo y me pregunto qué pasará después, hacia dónde voy. Luego de ese momento de revisión, decidí empezar de nuevo, con lo mínimo, y ¿qué es lo mínimo que se necesita para decir algo? Un pedazo de cartón. Esto ha sido como volver al origen”.

“Siempre me causaron desolación, esos carteles son como botellas tiradas al mar”.

De esta manera, Iguiñiz desarrolló un proyecto que venía madurando desde hace tiempo, inspirado en esos letreros de cartón amarrados en los postes, en los que alguien pide algún tipo de ayuda. “Siempre me causaron desolación –cuenta–, en su misma precariedad y disposición esos carteles son como botellas tiradas al mar”. A partir de esa impotencia, nació “Dejo este cuerpo aquí”, una de cuyas piezas presenta al proyecto De Voz a Voz Perú. La serigrafía de una mujer yacente sobre un cartón alude también a estos tiempos de muerte por la pandemia y la crisis política. “No es algo que pensé de antemano –dice–, sino que coincidió con el ánimo de la época. Es algo que estamos respirando y viviendo”.

Natalia Iguiñiz Boggio

Lima, 1973

Artista visual y docente en la Universidad Católica del Perú, maestría en Género, Sexualidad y Políticas Públicas (UNM SM). Activista feminista, eventualmente escribe, hace curaduría y diseño. Es mamá de Antonia y Vicente.

“La primera es un archivo de fotografías que retratan diversos usos de cartones para protestar, pedir ayuda o cobijarse”.

Una intervención en el espacio público

“Dejo este cuerpo aquí” es una intervención en el espacio público y una exposición que tiene tres partes. La primera es un archivo de fotografías que retratan diversos usos de cartones para protestar, pedir ayuda o cobijarse. La segunda es una instalación con piezas de cartón que se pusieron en diversas calles de la ciudad de Lima; los cartones usados fueron recogidos y reciclados del consumo familiar o de bodegas y calles, después fueron serigrafiados con tres partes del cuerpo de una mujer y acompañados por frases extraídas de ‘Los diarios del cáncer’ de Audre Lorde. Finalmente, la tercera son fotografías que registran algo de la vida de los fragmentos del cuerpo en las calles”.